Daniel Hare
Hace 7 horas
abril 18, 2007
Celebrando la bienvenida a la vida de ANTONIO...
Posted on 13:46 by María Ofelia ZP
Aqui comparto la memoria que escribió Roberto sobre nuestra reunión para celebrar el nacimiento de Antonio, con ensaladas en honor a este bebé que es fruto de una muy grande: Madre de Costa Rica, Padre de España, que se conocieron en México, se casaron en Madrid, se vinieron a vivir a El Salvador (donde se produjo nuestro encuentro y se asentaron las bases de nuestra amistad), luego se fueron a vivir a Honduras, lugar donde concibieron a Antonito, quien, como para agregar un ingrediente más, nació en Bolivia... lugar donde por ahora vivirá hasta que Dios muestre otro lugar....
Con el amor de siempre y para que quede constancia de la dicha que nos empieza a embargar cuando van llegando los nuevos miembros de "nuestra familia". Ojalá que podamos ser lo suficientemente conscuentes para ser unos buenos compañeros de viaje para estos niños y niñas que ya empezaron a nacer...
FLASHES DE NUESTRA PASADA "NUTRIVELADA CELESTE"
Espero que hayamos pasado una rica Semana Mayor.
El pasado Viernes 30 de marzo tuvimos nuestra noche CELESTE (asì como el trajecito del Niño Toñito de Sucre). Entre globos del cumpleaños 0 de este nuestro sobrino, Katya nos invitò a reflexionar sobre aquèllos eventos que, mientras duran, nos cuesta aceptar como pasos necesarios del proceso para resultarnos favorables.
Mientras nos nutrimos con la vista colorìsima de una tajada de sandìa eterna, y las ingeniosas ensaladas preparadas en el sitio con singulares ingredientes que incluìan fresas, piña y lechuga en un baño de miel/ melòn y zanahorias, u otra de pepinos y especies en vinagreta/ tomates rojìsimos remojados en aceite de oliva y orègano, refrescàndonos con una frìa pichelada de Agua de Jamaica, el vino tinto y rosado de Chile y un esponjoso helado de mango, coincidimos que frecuentemente nuestra mente alcanza el corto plazo, y nuestros malestares se maneja en esos mismos tèrminos.
Si bien el tiempo todo lo sana ( inclusive hasta los dolores màs intensos), quizà tambièn sea que nuestra visiòn toma su tiempo antes de enfocarse en un punto màs adelante.
Y por ello la importancia de cultivar la paciencia, y a veces ver desde afuera y desde arriba lo que acontece. No dejarnos molestar por un correo inesperado, sòlo porque nos fuè enviado con un propòsito que nos resulta ajeno, porque quizà sea con la intenciòn que nos interese o beneficie. No agravar la pena de otro, sumando la nuestra, sino aliviandola con nuestra balsàmica compañìa.
Y asì talvez màs tarde percibamos la coherencia de todo lo que nos pasa, en la red de sucesos que asì como nos han traìdo al Presente, seguro luego nos llevaràn desprendiendo telas de cebolla, como si tiernamente fueramos cargados por la Nana Sino (asì le llaman algunos al Destino) en un viaje, plàcido o arremolinado, quizà corto o quizà prolongado, de NUESTRO Futuro venidero.
Y mientras tanto, a lo mejor veamos en cada estaciòn de este recorrido: una experiencia luminosa, disfrutando desde la ventana que revelemos, el CELESTE del paisaje.
Gracias a los que asistimos en mente, cuerpo y/o buena voluntad.
Atentamente,
ROBERTO RIVAS
Con el amor de siempre y para que quede constancia de la dicha que nos empieza a embargar cuando van llegando los nuevos miembros de "nuestra familia". Ojalá que podamos ser lo suficientemente conscuentes para ser unos buenos compañeros de viaje para estos niños y niñas que ya empezaron a nacer...
FLASHES DE NUESTRA PASADA "NUTRIVELADA CELESTE"
Espero que hayamos pasado una rica Semana Mayor.
El pasado Viernes 30 de marzo tuvimos nuestra noche CELESTE (asì como el trajecito del Niño Toñito de Sucre). Entre globos del cumpleaños 0 de este nuestro sobrino, Katya nos invitò a reflexionar sobre aquèllos eventos que, mientras duran, nos cuesta aceptar como pasos necesarios del proceso para resultarnos favorables.
Mientras nos nutrimos con la vista colorìsima de una tajada de sandìa eterna, y las ingeniosas ensaladas preparadas en el sitio con singulares ingredientes que incluìan fresas, piña y lechuga en un baño de miel/ melòn y zanahorias, u otra de pepinos y especies en vinagreta/ tomates rojìsimos remojados en aceite de oliva y orègano, refrescàndonos con una frìa pichelada de Agua de Jamaica, el vino tinto y rosado de Chile y un esponjoso helado de mango, coincidimos que frecuentemente nuestra mente alcanza el corto plazo, y nuestros malestares se maneja en esos mismos tèrminos.
Si bien el tiempo todo lo sana ( inclusive hasta los dolores màs intensos), quizà tambièn sea que nuestra visiòn toma su tiempo antes de enfocarse en un punto màs adelante.
Y por ello la importancia de cultivar la paciencia, y a veces ver desde afuera y desde arriba lo que acontece. No dejarnos molestar por un correo inesperado, sòlo porque nos fuè enviado con un propòsito que nos resulta ajeno, porque quizà sea con la intenciòn que nos interese o beneficie. No agravar la pena de otro, sumando la nuestra, sino aliviandola con nuestra balsàmica compañìa.
Y asì talvez màs tarde percibamos la coherencia de todo lo que nos pasa, en la red de sucesos que asì como nos han traìdo al Presente, seguro luego nos llevaràn desprendiendo telas de cebolla, como si tiernamente fueramos cargados por la Nana Sino (asì le llaman algunos al Destino) en un viaje, plàcido o arremolinado, quizà corto o quizà prolongado, de NUESTRO Futuro venidero.
Y mientras tanto, a lo mejor veamos en cada estaciòn de este recorrido: una experiencia luminosa, disfrutando desde la ventana que revelemos, el CELESTE del paisaje.
Gracias a los que asistimos en mente, cuerpo y/o buena voluntad.
Atentamente,
ROBERTO RIVAS
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Nos enchufamos, gracias!
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Gracias,
Ma. Ofelia